El Tratado de Libre Comercio: Alborada de la tragedia económica para empresas nacionales, la clase obrera y el campo mexicano

Carlos Salinas de Gortari, George Bush y Bryan Mulroney, durante la firma del tratado en 1992
Carlos Salinas de Gortari, George Bush y Bryan Mulroney, durante la firma del tratado en 1992


Por La Marx México / Estados Unidos

La entrada en vigor del TLC, fue un milagro económico para las grandes multinacionales, al mismo tiempo que desgracia para millones de trabajadores en México y Estados Unidos. Tan solo en el año 1997, más de 5 millones de mexicanos emigraron hacia los Estados Unidos. Aunque el ex presidente Carlos Salinas de Gortari atribuye este fenómeno al impacto de la crisis de 1995, el TLC fulminó al campo mexicano, se dispararon las importaciones norteamericanas, el precio del frijol descendió de 3 mil 500 pesos por tonelada en 1993 a 300 pesos en el año 2002, el del maíz de 3 mil 500 a 300, mientras que el del tomate pasó de 2 mil 900 a 700 pesos en el mismo lapso. [1]

De 1994 a 2006, las importaciones de maíz pasaron de 2 mil 505 millones de toneladas a 10 mil 735 millones, es decir, ¡aumentaron 428%!. Del año 1988 al año 2000, el apoyo a los productores norteamericanos por parte de su gobierno, ascendió a 20 mil 283 dólares anuales, contra 720 dólares en México; es decir, el apoyo al campo norteamericano fue 30 veces superior.

De 1994 al presente 2021, los gobiernos de México y EU mantienen una política desigual de subsidios a los campesinos para abrir paso a multinacionales como Cargill y Monsanto. Decimos desigual, porque mientras en EU al campesino se le paga a veces para que reduzca su producción, al campesino mexicano se le dan limosnas para que no muera de hambre o resolverle algunas necesidades para desincentivar la producción en sus tierras y opte por venderlas o de plano, emigrar.

Tres hechos históricos marcan un parteaguas en el abaratamiento de la fuerza de trabajo a nivel mundial: las reformas económicas en China de 1989 que se impusieron con la masacre de Tiananmen, también conocidas como "socialismo de libre mercado" (regreso del capitalista), la caída del muro de Berlín y la firma del TLCAN. China y México se convirtieron en centros de super explotación de la fuerza de trabajo de las multinacionales de todo el mundo, pero principalmente norteamericanas, funcionando como bodegas y fuente inagotable de mano de obra barata.

El TLC visto por la clase obrera Norteamericana

Máquinas abandonadas en trabajos del gas parquean, Seattle, Washington, los E.E.U.U.
Máquinas abandonadas en trabajos del gas parquean, Seattle, Washington, los E.E.U.U.

Este hecho por supuesto, perjudicó a la clase obrera norteamericana, pues ante cada emplazamiento a huelga o lucha por mejoras salariales, la patronal tuvo la opción de mudarse a China, México o cualquier país tercermundista para mantener sus operaciones a bajo costo. Esto impactó principalmente en los estados norteamericanos donde existía la industria manufacturera, acererías y las minas. El medio oeste y el noreste de Estados Unidos es un desierto de fábricas abandonadas.

En el año 2016 tuvimos la oportunidad de conocer a un chico norteamericano durante la jornada de lucha contra la reforma educativa en Oaxaca, un periodista independiente llamado Jeff Lejan, originario de Seattle. En una charla informal nos platicó sobre el fenómeno de desindustrialización que se vivió en su país durante los últimos 30 años, que describen de manera muy gráfica lo que ha ocurrido con la clase obrera norteamericana después de la firma del TLC y las medidas neoliberales de los partidos Demócrata y Republicano que han arruinado al proletariado norteamericano.

Seattle era una ciudad industrial, que entró en auge después de la segunda guerra mundial durante el régimen de acumulación keynessiano, con la firma del TLC y la entrada en vigor de la globalización (neoliberalismo) como régimen de acumulación, muchas de esas fábricas se empezaron a mudar a países de tercer mundo, pero principalmente a China, Indonesia y México. La tasa de desempleo se disparó en esa y cientos de ciudades norteamericanas, dejando una enorme estela de obreros desempleados, muchos de los cuales votaron por Donald Trump en el año 2016 y fueron defraudados por el mismo.


Recuento de las empresas mexicanas quebradas tras la firma del TLC


Sector automotriz, el caso de Diesel Nacional (DINA)


El sector automotriz, fue uno de los más golpeados por la firma del TLCAN, representa el 7.5% del PIB nacional y el 14.6% del sector manufacturero, el cual a su vez, participa del 51% del PIB. De 1993 a 1998, la industria automotriz, registró índices de crecimiento superiores al PIB nacional y el doble que el crecimiento de la industria manufacturera, representa el 19% de las exportaciones y el 13% de las importaciones totales de México.

En 1955, el gobierno federal, a través de la Secretaría de Hacienda y la de Economía, aprueba la constitución de la empresa Diesel Nacional (DINA), de composición mixta (capital público y privado) siendo el Estado mexicano, accionista mayoritario. Sus instalaciones se ubicaron en Ciudad Sahagún, Hidalgo, llegando a tener 15 mil trabajadores en su mejor momento.

En 1989, DINA fue comprada por los hermanos Gómez Flores, de origen tapatío, la compra - privatización fue por 84 millones de dólares, para entonces, ya era una empresa líder en la fabricación de camiones de carga y autobuses, prácticamente sin ninguna competencia significativa en el mercado. [2]

En 1994, DINA adquirió Motor Coach Industries International (MCII), por un monto de 337 mdd, convirtiéndose en el productor número uno de autobuses en Norteamérica, con presencia en Estados Unidos y Canadá, convirtiéndose en la primera empresa mexicana NAFTA.  Sin embargo, al término de año, tras la devaluación del peso mexicano y desvanecida la ilusión salinista; DINA reportó una pérdida cambiaria de 600 millones de nuevos pesos. En menos de 24 horas, la situación había cambiado de manera dramática con el famoso "error de diciembre".

Los problemas financieros de DINA, se siguieron profundizando con la contracción del mercado tanto interno, como externo. En 1999, realizó un contrato a 10 años con la Wersten Star Trucks, empresa ampliamente reconocida en Canadá, donde se acordó la compra de 2 mil camiones a DINA en el año 2000, 3 mil en el 2001, y 4 mil en el año 2002. Este acuerdo nunca se cristalizó, en 1999, solo se compraron 163 camiones y 451 en el 2000.

En septiembre del año 2 000, WST fue comprada por Chrysler y esta a su vez, desconoció el contrato hecho con DINA, abandonándola a su suerte. En febrero de 2001, la producción se detuvo por completo, pues la demanda en el ramo cayó del 34% en 1995 al 1% en el año 2001. El desconocimiento de este acuerdo, dio el tiro de gracia a DINA, que declaró el cierre el 10 de septiembre de 2021.

Antes de la firma del TLC, DINA era protegida por los altos aranceles impuestos por el gobierno mexicano a las empresas extranjeras, hasta entonces, su única competencia eran algunas ensambladoras en territorio mexicano. Después de la firma del TLC y el retiro significativo de los impuestos arancelarios a empresas extranjeras, la dejó a merced de cinco compañías competidoras: Ford Motor Company, General Motors, Freightliner, Navistar y Kenworth.

7 años de "libre mercado" fueron suficientes para quebrar a una de las empresas más emblemáticas de origen mexicano en el sector automotriz.

Otras empresas mexicanas emblemáticas que fueron compradas por las multinacionales




Además del sector automotriz, otras empresas nacionales de capital privado, se fueron a la ruina y se vieron obligadas a vender, o ser absorbidas por las grandes corporaciones, principalmente norteamericanas. Por citar algunos ejemplos, entre el año 1999 y 2000, Video Centro (Video Visa, creado en 1983) se declaró en quiebra, sus sucursales sobrevivientes fueron vendidas por 125 millones de pesos a Block Buster, quien ya había demandado a la empresa mexicana en el año 1993 por "copiar su modelo de negocio", la segunda con mejores condiciones en el mercado, terminó por avasallar a la primera... Block Buster quebró en septiembre de 2010 ante la llegada de las plataformas digitales.

Otro ejemplo emblemático es "Reino Aventura", el parque de diversiones más grande de América Latina, que inició operaciones en 1982 y comprado en el año 1999 por Premiere Park (Six Flax), de la Warner Brothers.


Aviación


En el ramo de la aviación, la aerolínea "Mexicana de Aviación", fundada en el año 1921, fue la tercera aerolínea más longeva a nivel mundial, solo después de la" Sociedad Colombo Alemana de Transportes Aéreos (SCADTA)" hoy en día bajo el nombre de Avianca (fundada en diciembre de 1919) y de la Royal Dutch Airlines, que inició operaciones en octubre de 1919.

Mexicana fue creada por Lody A. Winship, Elmer Hammond y Harry Lawson bajo el nombre de Compañía Mexicana de Transportación Aérea (CMTA), comprada en 1929 por Panamerican World Airways (Pan Am), nada menos que la aerolínea más importante en Estados Unidos desde inicios de los años 30´s hasta su fin en 1991. A finales de los años 50´s e inicios de los años 60´s, los directivos de Pan Am estuvieron a punto de llevar a la quiebra, creando grandes tensiones con la planta laboral, que llevó a la creación de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA) en agosto de 1958. Bien entrados los años 60´s, Cresencio Ballesteros Ibarra y Crecencio Ballesteros Ibarra, Manuel Sosa de la Vega e inversionistas nacionales, compraron la totalidad de su capital, constituyéndose como la "aerolínea milagrosa" en los años 70´s por sus buenos resultados, así fue hasta 1981, que fue nacionalizada por el gobierno mexicano para sortear los efectos de la crisis de 1979.

En diciembre del año 2005, mexicana fue adquirida por el emporio hotelero de los Posadas, hasta su quiebra en el año 2010.

El eterno competidor de Mexicana, fue Aeroméxico, de carácter estatal con un pésimo servicio debido a la burocracia característica de la era dorada del priato, en los años ochentas estuvieron a punto de ser fusionadas, pero no fue así. En abril de 1988 estalló una huelga en Aeroméxico que derivó en la quiebra de la empresa. En octubre de 1988, nace Aerovías de México S.A. de C.V., conservando el nombre comercial de Aeroméxico y el logotipo característico del Caballero Águila. Después de varios fraudes y vueltas, Aeroméxico fue privatizada en octubre de 2007, quedando en manos de Banamex, un banco mexicano absorbido por la firma Citigroup, la mayor empresa de servicios financieros en el mundo con sede en Nueva York.


Bienes de consumo


En este rubro, destacan las marcas de refrescos locales como Yoli, Ameyali, Jugos del Valle, y el agua regiomontana "Topo Chico", pasaron a formar parte de The Coca Cola Company - FEMSA.

La famosa marca de pinturas Comex, pasó a manos de PPG Indrustries, Helado Holanda a Unilever. El "Pelón Pelo Rico de Grupo Lorena, la marca de Chocolate Abuelita, Carlos Quinto, pertenecientes a Grupo Lorena y La Azteca, pasaron a formar parte de los productos Nestlé, una multinacional suiza enfocada en el ramo alimenticio solo un año después de la firma del TLC.

La industria juguetera mexicana desapareció y quedó como una sub cultura en los mercados populares, para abrir paso a Mattel, Lego, Hasbro o Fisher Price. El tequila "Don Julio" fue vendido al consorcio inglés Diaego en 2014. Los tequilas marca Herradura, El Jimador, Sauza y Tres Generaciones fueron comprados por Brown-Forman, Constellation Brands y Beam Suntory Global.

En cuanto a las cervezas mexicanas, pasó lo mismo: Corona, la más vendida del mundo y parte del Grupo Modelo, fue comprada por la cervecera belga Anheuser-Busch en junio de 2012. Algo parecido ocurrió con el grupo cervecero Cuauthémoc-Moctezuma, absorbida por Heineken International en enero del año 2010.

Otro ejemplo ilustrador, es la cadena de comida rápida "Burguer Boy", fundada originalmente en el año 1968 por dos empresarios puertorriqueños y un mexicano, que iniciaron con 4 restaurantes. Posteriormente, Grupo Industrial Maseca compró la empresa y llegaron a tener 91 sucursales a lo largo y ancho de la república mexicana, siendo líder en el ramo, casi sin competencia alguna.

Aunque Mc Donalds entró a México desde 1985, con la firma del TLC, se quitaron muchos candados y restricciones al comercio internacional, desplegando toda su fuerza contra la primera cadena nacional de "fast food en México. En 1994 se remodelaron las sucursales que quedaban en pie para librar su última batalla, hasta que fue vendida en 1996 a la cadena estadounidense Whataburguer, que a la postre terminó por rendirse ante Ronald McDonald.

En resumen, la llegada de la inversión extranjera y 25 años de TLC (1994-2018), fue el apocalipsis para todas estas empresas cuyos dueños fueron puestos contra la pared, llevados a la quiebra y prácticamente obligados a vender.


La privatización de la banca


El imperialismo -el dominio del capital financiero- es la fase superior del capitalismo, en la cual esa separación alcanza unas proporciones inmensas. La supremacía del capital financiero sobre todas las demás formas de capital implica el predominio del rentista y de la oligarquía financiera, implica que un pequeño número de Estados financieramente "poderosos" destacan sobre el resto. La extensión de este proceso se puede juzgar por las estadísticas sobre las emisiones de toda clase de valores.

Lenin. Imperialismo, fase superior del capitalismo


La banca es un apartado especial cuando hablamos de la globalización como régimen de acumulación de capital (también conocida como neoliberalismo), pues es uno de los sectores clave de la economía, mediante el cual las grandes multinacionales afianzan su dominio. La definición arriba citada, resume en breves palabras este fenómeno.

En mayo de 1990, el entonces presidente de México, Carlos Salinas de Gortari, envió al Congreso de la Unión, un proyecto de ley que modificaría la propiedad de los bancos estatales mexicanos "mediante un régimen de propiedad mixta", es decir, abrir paso a la privatización de la banca:

"El Estado se propone no ser el accionista mayoritario de todas y cada una de las instituciones bancarias, aunque conservará una participación en la banca comercial y fortalecerá aquellas instituciones orientadas al fomento de actividades prioritarias concretas". [3]

De junio de 1991 a julio de 1992, se privatizaron nada menos que 15 bancos mexicanos, es decir, más de uno por mes. Al estallar la "crisis del tequila" en diciembre de 1994, los bancos ya privatizaron entraron en bancarrota, ante lo cual, el presidente en funciones Ernesto Zedillo Ponce de León, procedió a rescatarlos a través de un salvataje por 110 mil millones de pesos del recién creado Fondo Bancario de Protección al Ahorro (FOBAPROA), que años más tarde se convirtieron en 2 billones de pesos (100 mil millones de dólares al tipo de cambio actual), haciendo desembolsar cada año 50 mil millones de pesos para el pago de los intereses de dicha deuda. Originalmente esta deuda estaba calculada para pagarse en 30 años, es decir, estaría liquidada en el año 2024, pero actualmente se calcula que terminará de pagarse en el año 2070, lo cual supone un grillete de por vida para al menos 3 generaciones consecutivas de mexicanas y mexicanos.

Para darnos una idea de esto, al inicio del sexenio de Enrique Peña Nieto, la deuda externa estaba valuada en el equivalente al 45% del PIB, cifra que se elevó al 53% al final de su sexenio, y actualmente representa el 61% del PIB. A este respecto, cabe aclarar que el gobierno de López Obrador no ha roto con la política de endeudamiento con el Banco Mundial que fueron típicas de los sexenios anteriores.

Haciendo una consulta rápida en la página del Banco Mundial, en tres años, el gobierno de López Obrador, ha solicitado 16 préstamos al organismo [5], que suman la cantidad de 5 mil 111 millones de dólares, es decir más del doble de lo que pidió Enrique Peña Nieto en 6 años (2 mil 462 millones de dólares).


... Continuará


Notas


[1] El impacto del TLC en la Agricultura. Vía campesina

https://viacampesina.org/es/a-13-el-impacto-del-tlcan-en-la-agricultura-mexicana/

[2] El efecto de la apertura comercial en el sector automotriz mexicano: El caso de la quiebra del Consorcio Grupo DINA S.A. DE C.V.

Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Maria Luisa Saavedra García, M.A.F. Teresa de Jesús Vargas Vega, Heriberto Moreno Uribe

[3] El presidente mexicano anuncia por sorpresa la privatización de la banca. El país, mayo de 1990.


[4] Sitio web del Banco Mundial

https://projects.bancomundial.org/es/projects-operations/projects-list?countrycode_exact=MX&fbclid=IwAR3fTlXnli2Lyvwkh02xLRf4FWwQURKNqQ8ssPSo9APePnFjKrM1zYsqFSY&os=0