Entre los megaproyectos que impulsó el aún presidente se encuentran: el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT); el Tren Maya en los estados de Campeche, Yucatán, Quintana Roo y Chiapas; el Aeropuerto Internacional "Felipe Ángeles" en Santa Lucía Estado de México y la Refinería de Dos Bocas en Tabasco.
La construcción del tren maya, ha sido un impacto ambiental y social para los pueblos del sureste mexicano, su construcción ha sido apresurada sin los permisos ambientales necesarios al mismo tiempo la inseguridad, el despojo, la pobreza, el acceso al agua, son problemas que se agudizan. Así como el desmantelamiento de comunidades indígenas al ser desalojadas de sus pueblos.
Por otro lado la construcción del corredor interoceánico en el istmo de Tehuantepec promete una vida al estilo de Tijuana, donde nadie sabe quién pario a quien, un lugar lleno de maquilas en donde la mano de obra barata estará a la orden del día.
El T-MEC también ha significado convenios abusivos de empresas extranjeras tal es el caso de la trasnacional que se apropió del maíz olotón de la comunidad de Totontepec, AMLO no debería de permitir que extranjeros se apropien de nuestros recursos biológicos y saberes ancestrales, con contratos ventajosos