Sobre los métodos y "el vandalismo" de la CETEG

08.06.2025

Por Jesús Valdez/La Marx México 
 

6/6/25 


En el año 2015, cuando Enrique Peña Nieto impuso la evaluación punitiva, la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerreo (CETEG) se declaró en resistencia, mantuvo una dura jornada de movilizaciones y bloqueos, entre ellos, la autopista del Sol.


Derivado de esta jornada de lucha y ante la negativa a presentarse al exámen de permanencia, casi mil maestras y maestros fueron despedidos bien:


a) Por no presentarse a la evaluación punitiva.
b) Por haber faltado tres días consecutivos a laborar.


Esto acorde a la reforma de 2013 a la Ley General del Servicio Profesional Docente (una reforma laboral con perfil draconiano) y a la Ley Federal del Trabajo vigente.


Es decir, estos docentes fueron despedidos con todas las de la ley, sin embargo mantuvieron la jornada de lucha y meses más tarde fueron reinstalados.


Por esas fechas la amenaza llegaba a las filas de la Sección 22, existía mucho miedo y descontrol entre la base, un compañero les puso el ejemplo de la CETEG en Guerrero, al tiempo que analizabamos el asunto desde la izquierda revolucionaria y la base magisterial.


El camarada arengó en el siguiente sentido: 


"Si la CETEG con 15 mil agremiados pudo lograr la reinstalación de sus cesados después de irse a paro, faltar a trabajar más de tres días, no presentarse al exámen de evaluación y además les pagaron los suelos caídos de un mes y medio...


¿Por qué la sección 22 con cerca de 80 mil afiliados, no va a poder luchar contra la evaluación punitiva?"


Esa reflexión animó y orientó a uno de los sectores más avanzados del magisterio oaxaqueño para no temer y lanzarse a luchar contra la evaluación punitiva. Fue así que llegó el 28 de noviembre, fecha marcada en el calendario para asistir a la evaluación, la disyuntiva era arrodillarse o no asistir y enfrentar las consecuencias.


Ese día las diferentes corrientes neo charras y grupos de interés, agrupados en torno al grupo de los notables (ex - secretarios generales) dieron la orientación de no boicotear la evaluación en la asamblea estatal que sesionaba el 28 por la madrugada.


Los maestros de base no soltaron el plan de acción que ya se había trazado, porque de plantearse con anticipación en la asamblea estatal, era como una bala cebada, pues habían notado que cada que votaban una acción de alto calado, los charros y la quinta columna del gobierno del Estado dentro del movimiento magisterial, daba aviso a las autoridades; cuando el personal docente llegaba al lugar votado, ya se encontraba la Policía Federal esperándolos para frustrar la acción y eliminar el factor sorpresa.


Cerca de las 6 de la mañana, los profesores del sector Periferia empezaron a concentrarse rumbo a Tlalixtac de Cabrera para sabotear la evaluación punitiva, la operación hormiga empezó desde las 5 de la mañana y a las 6 am, la Policía Federal arribaba para comenzar la represión.


II


Comenzó el primer choque entre el magisterio que se empezaba a concentrar y la Policía Federal, la idea era concentrarse desde las 6 am y movilizarse hacia la sede de la evaluación a las 7 am, sin embargo la policía militarizada llegó antes. 


Desde la hora indicada arriba, empezaron los primeros enfrentamientos, la policía disparó gases lacrimógenos, la base magisterial respondió con piedras y cohetones, uno de esos cuetes penetró la rodillera de un policía federal, le explotó y fue uno de los primeros lesionados en el campo enemigo, sus compañeros lo asistieron y se empezaron a descontrolar. 


El enfrentamiento siguió, con el respectivo intercambio de piedras y cohetones, ya bien entradas las 7 de la mañana, los maestros seguían llegando, cuentan en primera persona los camaradas que estuvieron en ese enfrentamiento:


"Nosotros estábamos bien entrados respondiendo a la policía federal, y cuando volteamos hacia atrás, ya éramos un chingo de maestros, no sé de dónde salieron tantos maestros, pero ya éramos calculo unos cinco mil.


... No pues los hicimos correr, hasta después paramos los camiones en dónde venían de los charros de la 59 y los obligamos a marchar en contra de la evaluación, les gritábamos beeee beeee, porque eran acarreados del IEEPO y del Sindicato Nacional.


Cuando empezamos a avanzar, miramos otra vez hacia atrás y se veía mucha gente, no se le veía fin a la concentración. Ya después llegó Gines y toda la estructura sindical".


A eso de las 4 y 5 pm, se registraron dos enfrentamientos más, narran los compas:


"En el segundo enfrentamiento, los de la estructura sindical (el Comité Ejecutivo Seccional), se fueron a esconder a las camionetas del sindicato, pues los fuimos a sacar, les dijimos: -ustedes son la dirección y deben ir al frente, no tienen nada que hacer escondidos en los vehículos del sindicato - y los obligamos a ponerse al frente, porque nosotros estábamos recibiendo los gases y todos los madrazos".


Después del tercer enfrentamiento y el caos generado en Tlalixtac, la evaluación punitiva fue un rotundo fracaso, no hubo despidos, pero si presos políticos que después fueron liberados gracias a la fuerza del movimiento. 


En esas condiciones, se fue preparando el paro indefinido de 2016 que terminaría por destruir el filo punitivo de la reforma educativa.


Desde entonces, ningún gobierno se ha atrevido a volver a poner sobre la mesa ese tema.

Rescato estas experiencias a propósito que el día de ayer, maestras y maestros de la CETEG incendiaron las oficinas centrales del SNTE charro, en repudio a una dirección charra y gobiernista, le dieron vida a la consigna:

¡Alerta, alerta, alerta trabajadores, que haremos una fogata con charros y traidores!


 

Junio 6 de 2025